Recuerdo la pregunta, ¿te tocó la lotería?. No... "soy millonario, me encontré a mi".
Aquel día cuando volaba por la carretera camino del sur me llegaron dos mensajes, uno de mi hermano , de decía "respira profundo , porque es la primera vez que respiras consciente y libre".
Recuerdo otro de Sandra que decía "disfruta este momento , es único , como el primer beso, se feliz".
En aquel momento decía que cambiaba de vida. para mi lo era , unos decían que estaba loco y les contestaba "si y quizás un poco valiente"- También había los que decían que era valiente a lo que les contestaba , "si y un poco loco".
Los años han pasado y hoy creo que es como si hubiera vivido 25 años, por la intensidad, por la realidad, por la consciencia, por todo lo fuerte que he vivido todo...
Hoy, no me creo mejor ni peor que aquel... Simplemente uno que decidió vivir antes de morir. respirar antes que decir. Amar siempre antes que el miedo. Seguir siempre las señales. Ver la vida como un juego y no darle demasiada importancia a las teorías, simplemente son ideas para jugar. Lo importante hoy , después de lo recorrido creo que todos somos dioses y que la película es perfecta sea la que sea...
TENGO GANAS DE SEGUIR CAMINANDO SIN MAS, EN SILENCIO , SIN HABLAR.
Aqui hay otros hermanos que viven una realidad paralela, somos algunos los que vivimos en ese camino paralelo, hoy para mi no dice mas que un frutero, pero hablan bien...
Una Realidad Paralela (Documental Completo) from Nayadel D.T. on Vimeo.
Hace muchos años, vivía un hombre que era capaz de amar y perdonar a todos los que encontraba en su camino. Por esta razón, Dios envió a un ángel para que hablara con él.
-Dios me pidió que viniera a visitarte y que te dijera que Él quiere recompensarte por tu bondad - dijo el ángel. Cualquier gracia que desees, te será concedida. ¿Te gustaría tener el don de curar? -De ninguna manera - respondió el hombre - prefiero que el propio Dios elija a aquellos que deben ser curados.
-¿Y qué te parecería atraer a los pecadores hacia el camino de la verdad?
-Esa es una tarea para ángeles como tú. Yo no quiero que nadie me venere ni tener que dar el ejemplo todo el tiempo.
-No puedo volver al cielo sin haberte concedido un milagro. Si no eliges, te verás obligado a aceptar uno. El hombre reflexionó un momento y terminó por responder: -Entonces, deseo que el Bien se haga por mi intermedio, pero sin que nadie se dé cuenta - ni yo mismo, que podría pecar de vanidoso.
Y el ángel hizo que la sombra del hombre tuviera el poder de curar, pero sólo cuando el sol estuviese dándole en el rostro. De esta manera, por dondequiera que pasaba, los enfermos se curaban, la tierra volvía a ser fértil y las personas tristes recuperaban la alegría.
El hombre caminó muchos años por la Tierra sin darse cuenta de los milagros que realizaba porque cuando estaba de frente al sol, tenía a su sombra atrás. De esta manera, pudo vivir y morir sin tener conciencia de su propia santidad.