Somos gotas que fluyen en el río de la vida, amplificando las frecuencias de un reino cristalino. Somos gotas de paz, somos gotas de luz, somos gotas de amor. Nutrimos la Tierra con el agua clara de la vida nueva.
Al liberar tu esencia pura, ayudaste a parir un hombre nuevo. Sigamos iluminando. Sigamos alentando. Más almas deben recordar la alegría de vibrar en Unidad. Te celebro y agradezco por tu noble tarea humanitaria. Me siento honrado de saberte a mi lado.
Te llevo en mi corazón :)
Julio Pagano
Por más diminuta que parezca, cada gota de conciencia expande y eleva la vibración de la Tierra.
Unas tras otras, las gotas van cayendo. Nada parece transformarse. El goteo es casi imperceptible. El cansancio y la desolación dicen presente. El paisaje desértico de esperanzas crea la falsa ilusión de que nada va a cambiar. El vacío interior se agiganta. Las gotas siguen cayendo, expanden su vibración. La mente sostiene que todo está perdido. El corazón no se deja engañar, escucha cómo las gotas continúan brotando y ríe de felicidad. Su sabiduría le anuncia que el río está emergiendo. Libere sus compuertas. Ayude a que el agua corra. Sume para que el río de la conciencia espiritual irrumpa en todo su esplendor.
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